Muchos padres piensan que con la llegada de las vacaciones sus hijos perderán el rumbo del aprendizaje y los fuerzan a continuar estudiando contratando profesores que dan clases a domicilio, esto llega a causar traumas en la mente de los niños porque observan que otros juegan mientras ellos están encerrados en su casa estudiando con personas quizá hasta desconocidas para él.
Borra esas ideas obsoletas de tu mente y comprueba que existen otros métodos que ayudan a que los niños nunca dejen de aprender y disfruten el proceso.

Uno de esos métodos podría ser inscribirlos en Campamentos de Inglés, lugares al aire libre donde los niños puedan disfrutar de la naturaleza en su máxima expresión y a la vez estén recibiendo educación en un idioma que le será útil durante toda la vida.

El niño podrá desarrollar su mente con actividades que jamás podría realizar en su casa y a la vez gozara de la vida como nunca antes se lo pudo imaginar.

No perjudiques la infancia de tu niño, cuando se convierta en un adulto siempre recordara los agradables momentos que disfruto gracias a tu buena decisión, y así seguirá la rueda de caballitos por muchas generaciones.

El inglés no es difícil de aprender siempre y cuando se apliquen metodologías que se adecuen a las etapas de desarrollo del niño, además estos campamentos suelen tener personas que hablan el inglés nativo un argumento más para aplicar a esta opción.


Más info en http://astex.es/